Me miras con esos ojitos cafés
y respondo que: "sí"
cuando me preguntan
si tengo algún vicio.
Y te ríes,
y me haces reír,
y pienso que podría pasar así,
el resto de mi vida.
Es curioso como la vida cambia de repente,
como todo parece brillar,
después de pasar tanto tiempo a oscuras.
Ahora que estás,
parece que por fin me estoy aprendiendo a conocer,
es extraño como pareces saber siempre lo que pienso,
sin ni siquiera tener idea
de todo lo que pasé
antes de que llegaras.
Y me miras,
y haces una mueca graciosa,
y me dices: "te quiero",
y yo sonrío,
porque sigo siendo pésima en demostrar lo que siento.
Pero aún así,
me sigues mirando,
y no esperas un: "yo tambíén",
porque lo sabes,
porque estas seguro que yo también lo hago.
Y me miras,
mientras estoy en pijama,
cuando me siento enferma,
o cuando he terminado de llorar;
y juras que sigo siendo preciosa.
Me dices que soy la persona que has estado esperando
toda tu vida,
y yo no entiendo
por qué.
Y me miras,
y en serio me miras,
y parece que el mundo de repente desaparece,
porque estas tú,
y me estas mirando.
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